スケッチ 「４月３週」

 Necesito sacar cosas a diestra y zurda jajajajaa, trataré de no regresar a corregir expresiones, y más adelante buscaré la forma de corregir palabras sueltas con mala puntuación, o con letras coladas entre sus sábanas. Cómo los faldones de la abuela del niño del tambor, que sólo se quitaba una y la colocaba debajo de las otras, así siempre tenía una limpia para el día, y al final los lavaba para poder volver a comenzar con el ciclo. Regreso a cartas viejas, he pensado en publicar las cartas y las postales que me han llegado a lo largo de los años, omitiendo algunos nombres o datos que puedan develar cosas que no les incumban. Curiosamente escribo como si alguien más me leyera, cómo si quisiera que alguien más lo leyera, sentado en su cama frente al celular, en la computadora en un brake del trabajo, o a medias del día porque alguien más se lo pasó. Quiero contar las impertinencias del día, de mi día y el de los demás, de todos aquellos que me piden prestado un poco del tiempo y nacen entre letras cómo nuevos personajes, con diferentes gustos, diferentes vidas. Alguna vez alguien escribió muy joven: "escribo lo que no soy, lo que no conozco, lo que no viví". Y uno se queda pensando en si somos la peor versión de todas las posibilidades que pudimos ser. Alguna con menos miedos, menos torpezas, más seguridad y menos deudas. Día a día hay personas que nos empujan, que tratan de preguntar sobre nuestra mañana. Intentan interesarse, o lo hacen pero apenas lo percibimos; nos empujan nos quieren sacar a la vez que nosotros, rotos y con todo un equipaje a cuestas que no podemos simplemente olvidar, tratamos de empujar a los nuestros. Pero somos tierra y agua, nos empujan y nos escurrimos entre sus dedos. No es su culpa rendirse, dejarnos un momento; más adelante habrá tiempo y ganas de avanzar.